Un aborto? Por qué a mí?

Por alguna razón, queremos ser siempre perfectas. Por eso nos embarazamos a la primera, jamás tenems un aborto, nuestro embarazo es un momento idílico en nuestras vidas, la lactancia es algo maravilloso desde el momento cero y nuestros hijos duermen toda la noche desde el primer día.

Eso es lo que nos dicen y decimos en la calle a la gente.

Pero la realidad no es esa. No somos tan perfectas. Tardamos en embarazarnos más de lo que admitimos, sí tenemos abortos muchas de nosotras, el embarazo, por muy contentas que estemos de ir a tener un bebé puede ser duro, muchas náuseas y vómitos, dolor de espalda, dormir mal, muchos miedos..., la lactancia como comentaba en otro post, inicialmente no es tan sencilla como nos cuentan y, por lo menos en mi caso, mi bebé no duerme ni de lejos toda la noche!



Así que hoy vamos a hablar del aborto, para que, si te pasa a ti alguna vez, no creas que eres la única mujer a la que le ha ocurrido y puedas saber más sobre el tema.




¿Qué es el aborto?

El aborto es la pérdida del embarazo antes de las 22 semanas, aunque el 85% ocurren antes de las 12 semanas.
Si un embarazo llega a las 7-8 semanas, con una ecografía normal, el riesgo de aborto es menos del 5%.

1 o 2 de cada 10 mujeres sufren un aborto diagnosticado. Realmente la cifra es mayor pero muchas veces pasa inadvertido, pensando que es un dolor de regla fuerte.


¿Cuáles son las causas que lo provocan?

  • Hasta un 80% de los casos de abortos son producidos por alteraciones congénitas (la mayoría de ellas porque hubo una alteración en la unión del óvulo y del espermatozoide) y por tanto, la naturaleza finaliza un embarazo que no iba a acabar con un niño sano. Las alteraciones cromosómicas son más frecuentes según avanza la edad de la mujer (porque habría más óvulos defectuosos). Así por ejemplo, entre los 20-24 años, el riesgo de aborto es de un 11%, en cambio entre los 40-44 años es de un 50% y pasa a ser de un 93% a partir de los 45 años.
  • Alteraciones hormonales: es importante tener controladas las hormonas tiroideas, pues una alteración en ellas puede ser causa de abortos.  También el déficit de progesterona, la diabetes...
  • Causas autoinmunes
  • Causas infecciosas
  • Causas tóxicas: alcohol, tabaco, drogas
  • Alteraciones en la coagulación: enfermedades que producen trombos
  • Alteraciones anatómicas: pólipos o miomas en la cavidad uterina que impiden la correcta implantación del saco gestacional, úteros dobles o con un septo, incompetencia cervical.


¿Qué tipos de abortos puede haber? ¿Qúe hay que hacer?

La amenaza de aborto es la pérdida de sangre o contracciones antes de las 22 semanas.
Cuando hay una amenaza de aborto por un hematoma detrás de la placenta, recomendamos reposo y no tener relaciones sexuales, para que se pueda ir reabsorbiendo ese hematoma.

Si la causa del sangrado no es el hematoma, se podría hacer vida normal, aunque también recomendamos cierto reposo para vuestra tranquilidad.


Si en la ecografía no se ve embrión todavía o es tan pequeño que no tiene latido, os volveremos a ver en 10-15 días para ver la evolución.
Sólo en casos de duda de si el embarazo está bien situado o podría estar en las trompas o en algún sitio anómalo, pediremos la hormona del embarazo en sangre.


El aborto bioquímico es aquel que no se ha llegado a visualizar en ninguna ecografía, el test de embarazo da positivo y a los pocos días se empieza a sangrar como una regla fuerte y no se ha visto en ningún momento embarazo.


El aborto diferido a veces no da síntomas claros como sangrado o dolor, alguna vez nos decís que teníais muchas náuseas o el pecho muy hinchado y de repente dejáis de notarlo (no siempre que pase esto es por un aborto).
Al llegar a la revisión, en la ecografía vemos o que no hay embrión dentro del saco gestacional, cuando ya tendría que haber aparecido (huevo huero) o que el embrión no tiene latido y ha dejado de crecer hace unos días.
En estos casos, salvo que el embarazo sea muy precoz, lo ideal es realizar un aborto en quirófano.


Aborto en curso es cuando se empieza a sangrar expulsando los restos ovulares. Podría ser completo y que el útero quede limpio y no haya que hacer nada más o incompleto y que haya que hacer un legrado.


Normalmente en casos de uno o dos abortos, no hay que realizar ningún estudio a la pareja, pues se considera algo dentro de la normalidad.


Se considera abortos de repetición cuando hay más de  2-3 abortos. En estos casos sí que habría que realizar un estudio completo para descartar, entre otras cosas que alguno de los miembros de la pareja tenga algún problema genético, que la mujer pueda tener algún problema de coagulación, hormonal...


Pero ¿todos los manchados o sangrados son amenazas de aborto?

La respuesta es no. Existen otras causas de sangrado durante el principio del embarazo como pueden ser:

Sangrado por implantación: es un manchado o un sangrado escaso que ocurre en la mitad de los embarazos entre la semana 4-6. No se asocia a mal pronóstico por lo que no se considera amenaza de aborto.

Sangrado o manchado tras una relación sexual, por ejemplo. Muchas veces proviene del cuello del útero o de la vagina, pues debido al embarazo están más friables y con el roce durante la relación sexual pueden sangrar.



Así que ya sabéis, ante un sangrado al inicio del embarazo, debéis consultarlo pero no alarmaros hasta que os haya visto vuestr@ ginecolog@ y os haya realizado una ecografía.